De menopausia a Plenipausia: cómo vivir esta etapa con bienestar y plenitud
Por la Dra. Sonia Albero, ginecóloga experta en medicina integrativa y salud hormonal.
La menopausia sigue siendo, para muchas mujeres, una gran desconocida. A menudo se asocia con el final de la vida fértil y con una serie de síntomas que hay que “soportar”, pero la realidad es mucho más amplia, y sobre todo, mucho más positiva.
Qué es realmente la menopausia
La menopausia es un proceso biológico natural que marca el final de la menstruación y de la etapa reproductiva de la mujer. Suele producirse entre los 45 y los 55 años, y está causada por el descenso progresivo de las hormonas femeninas, especialmente los estrógenos y la progesterona.
Este cambio hormonal puede influir en diferentes aspectos de la salud: desde la regulación del sueño, el estado de ánimo o la piel, hasta la densidad ósea o la función cardiovascular.
Sin embargo, no es una enfermedad, sino una transición fisiológica. Y como tal, requiere comprensión, acompañamiento y cuidado.
Desmontando mitos
Durante años, la menopausia se ha vivido en silencio, rodeada de ideas erróneas. Algunos de los mitos más comunes son:
- “Ya no necesito ir al ginecólogo”. Falso. La revisión periódica sigue siendo esencial para cuidar la salud ósea, metabólica y cardiovascular.
- “Los sofocos son inevitables”. No todas las mujeres los presentan, y en la actualidad existen tratamientos eficaces y seguros que los controlan.
- “La menopausia apaga el deseo sexual”. En realidad, lo que cambia es la forma de vivir la sexualidad: con menos prisa, más autoconocimiento y una nueva forma de placer.
Romper estos mitos ayuda a liberar a las mujeres del miedo y de la desinformación.
Cómo cuidarte en esta etapa
Cuidarse en la menopausia significa entender el cuerpo y acompañarlo con hábitos saludables. Algunos consejos prácticos:
- Prioriza una alimentación rica en proteínas, calcio, omega 3 y antioxidantes.
- Practica actividad física regularmente, combinando fuerza y ejercicios de impacto moderado para proteger la masa ósea.
- Duerme lo suficiente y cuida tu higiene del sueño.
- No descuides tu salud emocional: la meditación, la terapia o los grupos de apoyo pueden ser aliados valiosos.
- Mantén activa tu vida sexual: la lubricación, los cuidados locales y la comunicación con la pareja son claves.
Pequeños cambios sostenidos tienen un enorme impacto en cómo se vive esta etapa.
De menopausia a Plenipausia
En los últimos años, un nuevo enfoque ha empezado a transformar la forma en que se aborda la salud femenina en esta etapa: la mirada integral. Ya no se trata solo de tratar síntomas, sino de acompañar a la mujer en todas sus dimensiones —física, emocional, sexual y mental—.
Desde mi experiencia clínica, he comprobado que cuando se aborda la menopausia desde esta perspectiva, la mujer recupera energía, equilibrio y bienestar. Por eso, me gusta hablar de Plenipausia: el momento en que, más allá de los cambios hormonales, la mujer se reconecta con su plenitud.
La menopausia no es el final de nada: es el comienzo de una etapa de autoconocimiento y fortaleza.
Y sí, puede vivirse con plenitud.
Dra. Sonia Albero, ginecóloga experta en salud femenina y fundadora de Clínica Plenipausia, un espacio dedicado al abordaje integral de la salud de la mujer en la transición menopáusica y en la menopausia.