¿Quieres más información?
Una de las intervenciones estéticas más demandadas, por sus buenos resultados, es la rinoplastia, ya sea por motivos estéticos como por razones más relacionadas por la salud.
Esta operación es igualmente realizada en hombres como en mujeres, ya que en ambos sexos nos podemos encontrar con problemas que afecten a la expresión de nuestro rostro y esta intervención es capaz de solucionar la mayoría de problemas con unos muy buenos resultados.
Esta intervención puede realizarse mediante operación abierta o cerrada. Aquí tienes toda la información sobre este método:
Cuándo se utiliza la rinoplastia abierta
La rinoplastia abierta permite solucionar la mayoría de problemas tanto de estética como aquellos que supongan un problema de salud ya que resulta muy cómoda a la hora de acceder a cualquier zona de la nariz, lo que resulta una técnica sencilla y cómoda de intervenir.
Por este motivo es el procedimiento que se utiliza sobre todo en casos como segundas operaciones o retoques, intervenciones complejas o reconstrucciones y cirugía reparadora en casos de accidentes o deformaciones.
No obstante, por sus buenos resultados, este sistema es muy común y puede suceder que incluso en pacientes con intervenciones sencillas el cirujano opte por esta modalidad.
Cómo se realiza esta operación
Salvo casos muy excepcionales la rinoplastia se efectúa con anestesia general, por lo que estaremos dormidos durante toda la intervención. Este tipo de anestesia no sólo implica que no sentiremos ni dolor ni molestias durante la operación, sino que tampoco fluirá sangre en la zona, y la hipotensión y el nivel de oxígeno estará en todo momento controlado.
En primer lugar se hace una incisión en la base de la nariz, entre los dos orificios nasales, conocido como columela. Con esta incisión el cirujano puede levantar la piel accediendo directamente al hueso y cartílago para realizar la intervención que sea necesaria, independientemente de si se trata de una reubicación de tabique, remodelación de la punta de la nariz o del dorso nasal, por ejemplo.
Cuando ésta termina, se vuelve a colocar la piel y se cose en el mismo sitio donde se hizo la intervención de manera que la cicatriz queda oculta en la base de la nariz.
Principales ventajas de la operación de nariz abierta
El principal beneficio de una rinoplastia abierta es la comodidad para el cirujano, que puede trabajar de forma más segura y anticipando mucho mejor los resultados, consiguiendo una experiencia mucho más satisfactoria.
Es precisamente esta comodidad durante la intervención la que lleva a optar por este método en los casos más complicados e, incluso, en muchas operaciones más sencillas.
Si se opta por este procedimiento aunque es cierto que tendremos una pequeña cicatriz en la base de la nariz, nos aseguramos unos resultados más exactos a lo que buscamos.
Inconvenientes de la rinoplastia abierta
Por supuesto, aunque es una técnica que permite un trabajo más cómodo para el cirujano y los resultados son más previsibles, lo cierto es que también podemos hablar de alguna desventaja con respecto a la operación de nariz cerrada.
La principal diferencia es que se trata de un sistema algo más invasivo, la cirugía dura más tiempo e implica irremediablemente una pequeña cicatriz que, con la rinoplastia cerrada no tendremos.
Fuentes:
http://www.medigraphic.com/pdfs/cplast/cp-2005/cp052f.pdf
http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0034-74932005000400002
¿Te interesa? Contacta con nosotros:

